Idoia Armendariz Mantaras
8 Feb 2013
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La incubadora: buen invento, mal uso. (III)

Cuando el bebé es separado, todo su organismo se pone a funcionar con un único objetivo: reunirse con su madre. El bebé entra en estado de pánico y llora lo más fuerte que puede para que su madre le oiga. Esto supone un gran gasto de energía, así que cuando no puede más entra en un estado de calma forzada en el que segrega grandes cantidades de opiáceos endógenos para soportar la situación. Cuando se recupera un poco vuelve al llanto. Para sobrevivir solo más tiempo, reduce su circulación periférica, centrando la energía en mantener la circulación en el abdomen, tórax y cerebro y produciéndose una bajada de temperatura. El ritmo cardiaco se altera y la respiración se hace periódica, con momentos de apnea (ausencia de respiración). Los niveles de cortisol, la hormona del estrés, se disparan en el bebé hasta alcanzar niveles neurotóxicos.

Esta situación se resuelve manteniendo al bebé con su madre y no con una incubadora ni en una cuna de calor, reservando estas últimas exclusivamente para los casos de verdadera necesidad y entendiendo que la separación es un daño en sí misma.

El modelo de atención que infantiliza a la madre poniendo en duda su capacidad para dar los cuidados al bebé debe ser desterrado para siempre, tanto para los recién nacidos a término como para los prematuros o enfermos, integrando a los padres en las rutinas de las unidades neonatales. En el caso de los prematuros, el Cuidado Madre Canguro es el estándar de cuidados que proveer al bebé, dentro de lo que se llama “los cuidados centrados en el desarrollo”. Este tipo de atención no prescinde de la tecnología, sino que la usa en su justa medida.

Graficas que muestran la diferencia de las contantes vitales del bebé en la incubadora y el bebé con su madre en contacto piel con piel: Fuente: Restaurando el Paradigma Original. Nils Bergman.

Para leer la primera y segunda parte de este artículo: La incubadora: buen invento, mal uso. Parte I/ Parte II

Bibliografía:

En inglés sobre el modelo de atención que se promulgó con las primeras incubadoras:

Baby Incubator Exhibit at the Pan-American Exposition in Buffalo.

Ana
8 Feb 2013

Esos gráficos lo dicen todo, pero para los profesionales lo importante es su organización,  recuerdo un comentario en el blog de una enfermera que decia que no nos olvidemos que estamos en un hospital con su organización y como iban a limpiar con las madres con sus bebés.

Ilusas de nosotras que creíamos que lo importante en un hospital eran los pacientes, su salud y su bienestar.

Yo dejé de creer en el genero humano el día que acudí a un hospital a dar a luz,  lo triste es que la primera medicina que necesitan esos bebés y niños hospitalizados es a sus madres. Una medicina muy barata para el sistema,  pero que se les niega sistematicamente y eso me preocupa, ¿que hacen con nuestros hijos cuando están solos y desprotegidos?

Julia Alonso Soto
9 Feb 2013
Al sistema no le interesan los pacientes sino el enriquecimiento y los intereses de la cúpula de la pirámide. Por otro lado la "casta médica",siempre por encima del bien y del mal, ataca a los más débiles, mujeres embarazadas y bebés. los que no pueden protestar. ¿Qué les enseñan o hacen en la carrera, a estos sanitarios para lavarles el cerebro de semejante manera?