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16 Abr 2010
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El verdadero dilema de la lactancia

Por Ángeles Cano El periódico adn publicó ayer un artículo muy interesante sobre "El Dilema de la lactancia"
Muchos son que dicen qué práctico, hoy en día puedes optar por una cosa u la otra ¿Pecho o biberón? Eliges y ya está. Como si fuera tan fácil. Como si fuera solo eso. En realidad el dilema veo en no poder elegir porque la realidad no te da opción. Alejar el bebé de su madre y su pecho nada más nacer- "Nos lo llevamos a observación dos horitas"-, acceso restringido a las unidades de neonatología para los padres y la sedación aplicada durante y después de muchos partos y cesáreas ayuda a que la mujer termina dejando un deseo inicial de dar el pecho a su hijo, si, según las encuestas a la gran mayoría de las mujeres les apetece dar el pecho en un principio...probar por lo menos, que no pierdes nada, ya que nuestra generación no lo ha vivido, y aunque nos da cosa, gana la curiosidad: ¿cómo será? El verdadero dilema viene luego y es la gran falta de conocimientos de los profesionales entorno a la lactancia en general y de muchos pediatras en especial. Vemos lactancias que han empezado en las peores condiciones y que no terminan de arrancar simplemente por falta de apoyo. Lactancias que se convierten en sufrimiento, muy a menudo en lactancias mixtas desesperantes. Y madres que no paran de preguntarse si su hijo "se queda con hambre o no" porque es lo que han escuchado en el hospital. Pediatras que recetan suplementos porque desconocen el Código Internacional de Sucedáneos de la Leche Materna, y nos insinuan: "A ver si tu leche le alimenta lo suficiente" y que nos dicen que un bebé tiene que seguir a raja tabla una tal curva de percentil. Las hay que no saben que hay curvas distintas para bebés alimentados con biberón y curvas para bebés alimentados con pecho. Las que no saben que los bebés de biberón también tienen derecho a comer cuando tienen hambre y no cuando lo indica el reloj. A menudo nos dicen "mira, cambia a biberón, así controlamos lo que está tomando" sin tener en cuenta que la madre tal vez busca una solución para seguir dando el pecho. Hemos perdido el instinto que llevamos todas dentro para saber si nuestro hijo está bien o no y hemos pasado la responsabilidad de la alimentación de nuestros hijos a otras personas. A veces perdemos la poca confianza que tenemos en la tercera visita al pediatra o cuando vamos al hospital con mastitis y dolores horribles y la atención allí se reduce a que nos regalan las famosas pastillas. ¿Pecho o biberón por elección? No lo tengo nada claro.