
Violencia obstétrica: Primera sentencia que la reconoce en España

El reciente fallo del Tribunal Supremo Xustiza de Galicia (TSXG), que condena al Sergas por violencia obstétrica, marca un antes y un después en el sistema judicial español. Por primera vez en un tribunal superior, la justicia reconoce esta forma específica de violencia, normalizada durante décadas en los ámbitos sanitarios, y le pone nombre, consecuencias y reparación.
La sentencia 143/2025, de 31 de marzo de 2025, dictada por la Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia autonómico, ordena al sistema de salud gallego indemnizar a una mujer con 60.000 euros, no solo por los daños físicos y psicológicos sufridos, sino también por haber sido víctima de violencia obstétrica. Este reconocimiento judicial es enorme: abre camino para que muchas otras mujeres puedan poner en palabras lo que vivieron y exigir respuestas.
Pero esta victoria genera sentimientos encontrados.
Porque… ¿cómo celebrar que el Estado reconozca que el cuerpo de una mujer fue vulnerado, violentado, ignorado? ¿Cómo festejar una sentencia que llega después de años de lucha judicial, de revivir el trauma, de exponer la intimidad más profunda ante instituciones que tantas veces dan la espalda?
Lo que se celebra, si es que la palabra cabe, no es el dolor que originó el fallo, sino que por fin alguien miró a esa mujer a los ojos y le dijo: “Tú tenías razón. Eso no está bien. Y habrá consecuencias”.
Eso, que parece básico, ha sido negado sistemáticamente a miles de mujeres.
Esta sentencia también es una forma de dar sentido a cada reclamación que se presenta “para que no le pase a otra”.
Agradecemos a todas las que han tenido el coraje de denunciar, a sabiendas de que el proceso puede revictimizar. A todas las que han puesto cuerpo, palabra y memoria al servicio de una lucha colectiva.
Porque cada vez que alguien se anima a decir “eso que me hicieron fue violencia”, aunque le digan que exagera, que no fue para tanto, que así es el protocolo, está abriendo una grieta en ese muro de impunidad. Y de a poco, esa grieta se vuelve paso.
Hoy el paso es firme. Es legal. Es reparador. Que este fallo no sea un punto aislado, sino el principio de una justicia que escuche, que crea y que actúe.
Referencias
Reinero, D. (2024, mayo 24). Primera condena de la justicia gallega al Sergas por violencia obstétrica. InfoLibre: https://www.infolibre.es/politica/primera-condena-justicia-gallega-sergas-violencia-obstetrica_1_2002854.html
Sentencia accesible en: https://www.poderjudicial.es/search/AN/openDocument/4585afdbc8812d59a0a8778d75e36f0d/20250522