Diana Montero
14 Mar 2013

Yo no vi que la gente se dirigiese a los profesionales con mala educación, pero quizá mis propias maneras, que son muy directas, a ti puedan resultarte ofensivas, y hablo de mí en concreto porque estuve allí, intervine y pregunté. En cualquier caso, creo que hasta las personas más maleducadas del mundo siguen teniendo derecho a una atención excelente y con sus impuestos la costean.

Me parece que preguntar, cuestionar, poner en duda y criticar son ejercicios muy sanos que debemos poner en práctica siempre que tengamos ocasión, pues para eso estamos en democracia y así es como se consiguen las mejoras. El respeto bilateral, ¡por supuesto!, pero lo de la rabieta... No termino de verlo. Vuelvo a repetir, incluso los usuarios más desagradables y que peor nos puedan caer tienen derecho a ser respetados, escuchados y atendidos.