Ana
17 Feb 2013

yo no lo llamo machismo, esto es una cuestión de poder de poder sobre otro y de utilización de alguien para sus propios fines.

Una mujer embarazada es la cobaya perfecta, seguro que hasta hay documentación entre los profesionales sanitarios, de hecho tienen una carta perfecta que hasta ellos le dan un nombre "la carta del niño muerto", como si estuvieran jugando al poker, lo triste es que si juegan al poker para tener cobayas para que otros práctiquen, para conseguir dejar limpita de mujeres la sala de paritorío para el siguiente turno, me imagino hasta apuestas entre ellos-as si lo consiguen.

A mi me atendieron mujeres, no es cuestión de machismo o feminisno, es cuestión de tener poder sobre otro y una mujer de parto es la persona más indefensa y vulnerable que existe, por eso debería existir unas leyes especificas contra la violencia obstetrica solo así se conseguirá erradicarla.