Yo si creo que existe. Yo me tuve que compinchar con una comadrona para que me dejara "parir" dentro de lo posible en la sanidad pública a mi manera. A pesar de todo, le regalé una episotomía, por su tranquilidad, porque en aquellos momentos tampoco yo tenía fuerzas para imponerme y fui consciente de que le permitía para ella y no para mí. Aún así, con una especie de síndrome de stokolmo me siento agradecida porque hizo lo que pudo dentros de lo que podía hacer.... Así de triste!