No estoy de acuerdo con el artículo. He dado a luz hace tres meses a mi primer bebé y para mi la epidural fue una maravilla. Durante el embarazo nunca tuve miedo al parto, todo lo contrario tenía ganas de que llegase el momento para saber y sentir lo que es parir. En principio no quería epidural, pero si después veía que no aguantaba no tenía ningún problema en ponérmela. Cuando llegó el momento me la ofrecieron y no la quise pero más tarde fui yo quien la pidió. Pude descansar toda la noche en la sala de dilatación y cuando tuve que empezar a empujar sentía totalmente las piernas. Además te aconsejan las matronas que ya no te pongas más epidural. Yo estoy totalmente a favor de la analgesia porque te ayuda a descansar y a estar preparada para empujar con piernas y todo.