Básicamente, se mueren bebés, sí. Y niños, y adultos.
A pesar de la medicina, todos acabamos muriendo.
Es probable que si todo fuésemos entubados nada más nacer, alimentados por vía intravenosa, aislados de los focos de infección como ríos o campos, cruzados con otros seres como nosotros en máximas condiciones de asepsia y control, desestimados los embriones no óptimos, etc, probablemente, viviríamos más años, y algún niño habría desarrollado más tarde ese cáncer o esa cardiopatía letal.
Claro que depende de quién sea tu hijo, si el que está entubado de por vida o el que se muere con 12 años.
Y depende del mundo que quieres, de lo que ames la vida.
Está bastante mejor contado en Mátrix.
En lo que concierne al libro de Isabel, todas las mujeres y bebés estamos de enhorabuena con la reedición de este libro: gracias Isabel, muchas muchas gracias por servir de pastilla azul a muchas mujeres que deciden así, salir de Mátrix.