Creo que a lo que Patricia se refiere es que en un caso no se puede achacar a la actitud y el buen hacer de nadie, puesto que se trata de un aborto natural y espontáneo, cuya superación llave un cauce "X"; y en otro caso se produce dolor y sufrimiento evitable por parte de supuestos profesionales de atención al parto.
Evidentemente la pérdida de un embarazo, es decir, de un hijo que se está gestando, tiene más o menos importancia, en función de cada persona. No todos vivimos de igual manera un mismo acontecimiento, influyen muchos factores, educativos, emocionales...
Evidentemente un duelo es un duelo, y si hay alguien que se encuentra en él, puede ser que no importe tanto el motivo, sino el proceso que atraviesa.
Un saludo,
Adriana