Morir dando vida a mí sí que no me da pena. Es incluso más digno que en un hospital rodeada de extraños que te han abierto las entrañas sin necesidad mientras hablan de sus vacaciones.
Pero no falleció por sus ideas sino probablemente ( no se sabe aún) por un infarto o por una hemorragia como ocurre a diario en un hospital.