Adri (unverified)
6 Ene 2012
Antonio, no se de dónde has salido. Ni en qué periodo histórico mental te encuentras. Yo tengo dos ojos atentos, para observar, leer y estudiar, unos oídos muy finos para escuchar, un alma con la que me permito sentir, y finalmente una boca para hablar, ¡sí!, juzgar ¡sí!, criticar ¡sí!, es una responsabilidad que he adquirido como ciudadana adulta. Cada cosa que miro o leo, la analizo y la proceso, genero una opinión interior, y luego hablo. Llevo leyendo tres años sobre cuestiones de parto, nacimiento, embarazo y crianza. Llevo tres años observando atentamente el mundo, sacando conclusiones, extrayendo información del entorno. Por desgracia para el sistema, en este caso sanitario, llevo TRES AÑOS ANALIZANDO: PENSANDO. Y lo mejor, no paro de incitar a mucha gente a que lo haga. Como yo la inmensa mayoría de las mujeres que por aquí comentan. Así que "sin ninguna base", no. Con muchísimos argumentos. El sistema ha tirado mucho de la cuerda, y siento comunicarte: que la ha roto. Estamos hasta los cajones, como ciudadanos del mundo, de recibir constantemente por todos los lados. Incluso por los que se supone que son agradables, naturales y placenteros. El parto no es una enfermedad, el recién nacido no es un foco de patologías y la madre no es una niña maleducada. EL PARTO ES NUESTRO. Y mientras no les necesiten las mujeres pariendo con su cuerpo, su mente y su fisiología, dedíquense a sus labores: recíclense, investiguen, fórmense, contrasten, aprendan, viajen, abran su mente. Ser un mejor profesional, actualizarse y caminar del lado de la ciencia, es su primera y única obligación. Por y para eso les pagamos. Para todo lo demás a lo que se dediquen son prescindibles. Si no son capaces de asumir el reto y cumplir con las obligaciones profesionales, hacen un gran favor a la sociedad retirándose. Un saludo, Adri