Y no es extrictamente un problema de xenofobia si no de desprecio hacia la mujer, hacia lo que sentimos, pensamos o queremos, así de simple. Es machismo, es violencia obstétrica. Las extranjeras reaccionan porque se encuentran en un entorno extraño y no saben hasta que punto son o no normales o habituales estas prácticas. Sienten que suelen ser tratadas de forma distinta por no ser de aqui, y no saben si el maltrato del médico se debe también a eso o no. Pero esto lo sufrimos también las españolas, pero lo asumimos como normal y no nos quejamos. Las extranjeras además tienen con que comparar, saben por familiares y amigas que en sus paises de origen las cosas son distintas y se niegan a ser tratadas asi solo por el hecho de estar embarazadas. Cada vez somos mas las que nos damos cuenta de que esas no son maneras y que decimos BASTA!