Uffff!!! me reconozco en un montón de cosas, durante mi primer embarazo... Me hizo falta tener una mala experiencia para, en el segundo, aunque sólo fuera por intentar evitar al máximo las probabilidades de que se volviera a repetir, por puro miedo, empezar a buscar información. A partir de ahí empezó un camino sin retorno, el mejor! Después de saber algo más, ya no sólo quería evitar sufrir otra mala experiencia, sino que aspiraba a disfrutar de todo lo que fuera posible, de todo lo que la naturaleza ha puesto a nuestro alcance. Esta es mi historia, pero ojalá cada vez más mujeres encuentren y conozcan sus deseos, naturaleza, derechos, fuerza y sabiduría sin necesidad de haber sufrido nada.