Miranda (unverified)
23 Abr 2010
Es absolutamente penosa esta situación. No debe ser una lucha por el poder sino una decisión objetiva de quien es el profesional mejor preparado para atender un parto normal. El profesional mejor formado y preparado para atender un parto normal y acompañar a una parturienta es la matrona. El ginecólogo NO está formado para observar y mantenerse al margen para intervenir solo en caso de necesidad, es decir que no debería atender un parto normal. La ventaja de un hospital es precisamente esa, que cuando hace falta un parto instrumental o una cesárea, pues, la matrona de turno deriva la parturienta al ginecólogo de turno que a continuación atiende esa complicación. Hay que dejar claro que la matrona NO es la "ayudante" del ginecólogo, sino que estamos hablando de dos tipos de profesionales distintas que deben estar al mismo nivel complementándose y trabajando en equipo para dar un servicio de calidad en la atención al parto. Y no como están ahora, con los ginecólogos en el poder "haciendo partos". A ver si las matronas saben aprovechar esta oportunidad para acordarse que son profesionales formadas para algo que los ginecólogos no pueden proporcionar dado a que tienen otro tipo de formación. ¡Ojalá que sirva para algo esta situación¡ ¡ánimos a las matronas que están luchando por la autonomía de su profesión!