Francisca (unverified)
18 Sep 2015
Hola a todas, les cuento que yo también tuve un aborto espontaneo y expectante. Iba en la semana 11 cuando tuve unos pequeños sangrados color café con leve dolor abdominal como el premenstrual. Hablé con mi doctor, y fui a controlarme. En la eco apareció que el corazón de mi bebe no latía y que habia crecido hasta la semana 8+2, justo un par de días después de la eco en que alcanzamos a conocerlo y donde se vio todo normal. La verdad fue una noticia terrible, nuestro primer hijo y muy esperado por todos. EL doctor me ofreció las tres alternativas: natural, pastillas y legrado. Le dije que quería lo más natural posible. Me dijo que me quedará en casa, me dio licencia por 7 días y me dijo que dentro de los sgtes. 3 a 5 días tendría el aborto. Me recomendó algunos analgésicos por si presentaba mucho dolor. Bueno, seguí con los pequeños sangrados. Y al segundo día comencé con los dolores abdominales. Fueron dolores intensos, creo que muy parecidos a contracciones. No puedo describirlos bien, porque es primera vez que los vivo. Llega a doler hasta la espalda, y vienen en pulsos cada 3 a 5 minutos. De verdad, el dolor no pasaba y yo recostada junto a mi marido no sabía como manejarlo. Pero en algún minuto recordé los videos que había visto de parto natural, y me senté sobre el wc y esperé sentada cada contracción haciendo fuerza como si fuera un verdadero parto. Mi marido a mi lado haciéndome masajes en la espalda me hacía soportar de mejor manera ese dolor, que se mezclaba con penita cada ciertos momentos. Fue así como rápidamente expulse un par de coágulos, y el saco embrionario. De coloración blanquecina y de consistencia mucho mas solida que un coagulo. Queridas, nose como explicarlo pero una vez que tuve esa última gran contracción, el dolor paso. Y luego de hacer una oración por nuestro pequeño angelito, les puedo decir que la sensación de pena se convirtió en amor...una paz de sentir que la naturaleza y dios habían actuado y yo junto a mi marido eramos cómplices de su voluntad y no victimas. De verdad creo que es un proceso difícil pero muy sanador. No digo que ya no hay nada de penita, pero creo que hay mas paz en nuestros corazones. Vivimos un momento intimo y de mucho respeto a ese angelito que siempre estará en nuestros corazones como nuestro hijo mayor. Yo sé que somos organismos distintos, entiendo que debe ser difícil la espera si uno aún no ha comenzado con sangrado cuando detectan que el bebe ya no esta con latidos. Quizás si me hubiera tocado esperar semanas, lo de expectante se vuelve angustiante. Pero en mi reciente experiencia les confieso que creo que al hacerlo de forma natural, se envían las señales correctas para que nuestro cuerpo tenga una mejor recuperación...en cuerpo y principalmente en alma. Espero mi experiencia les sirva...quise compartirla por que me hizo mucho sentido lo de la soledad que se vive en las pérdidas. Un abrazo a todas!!!