SUSANADM
26 Jun 2017

Soy enfermera, y como profesional sanitario, tengo que agradecer la oportunidad de aprendizaje con pacientes de carne y hueso, que difiere bastante de la respuesta a tus acciones que te puede dar un trozo de plástico como los muñecos. Por lo que estoy a favor, de que los estudiantes tengan esa experiencia. En lo que difiere enormemente, y ello parte de mi experiencia previa, es que esas personas entren y salgan por las habitaciones del paciente sin respeto, como "Pedro por su casa", no se presenten a los pacientes, realicen acciones sanitarias sin previa confirmación del personal tutelado y sobre todo que haya abundancia de estudiantes en un mismo parto/ intervención quirúrgica, y se muestre a los pacientes como si fuera un circo. Recuerdo como de estudiante tuve la oportunidad de entrar en un parto complejo de una madre heroinomana, era algo que muchos querian presenciar pues la madre estaba en un estado de agitación extrema. En la sala nos reunimos: 1 ginecologo adjunto, 1 matrona adjunta, 2 residentes de ginecologia y 3 de matrona, 2 estudiantes de medicina y 3 de enfermeria, más auxiliar. En total en la sala había 13 personas. ¿Creen que ese fue un parto respetado? ¿Creen que era necesario que 13 personas nos dedicaramos a aprender en ese momento tan delicado? En resumen y bajo la experiencia, creo que es fundamental que los estudiantes sanitarios se enriquezcan de una relación sanitario-paciente desde el principio, pero siempre que sea con respeto y sin ser masificado.