Cristina gutierrez (unverified)
1 Jun 2017

Enviado por Cristina gutierrez (no verificado) el

Enlace permanente
Lo que expresamos por la boca , viene de nuestro interior, alma, como se quiera llamar. Revisemonos por dentro antes de soltar lo que guardamos. Las palabras deben cuidarse . Para mí la formación de doula ha sido un crecimiento en todos los aspectos, me hubiera gustado que mi madre y mi pareja la hubieran hecho, o incluso otra que se trabaje uno mismo como persona también me hubiera venido bien para que supieran acompañarme en mi maternidad, lamentablemente no he tenido ese beneficio por parte de ellos. Aunque mi parto fue en casa, con matrona y doula, pude ver claramente que papel desempeñaba cada una. La matrona era la matrona, cuidando mi perine para no desgarrarme, comprobando los latidos de mi bebe, evaluándome a mí cómo evolucionaba, comprobando cuanta cantidad de sangre había en las toallas, mi tensión, pulsaciones, respiraciones, la de mi bebe y mil cosas más que no le daba a basto y eso que solo atendía una mujer de parto solamente o sea yo, la doula como una hermana o amiga íntima o alguien que con solo su presencia me hacía sentir que yo podía pari que en mí está todo lo que necesita mi bebe, caricias, bellas palabras bien dichas y en el momento justo, y cuanta falta hace todas estas cosas bonitas después de verte con un bebé al que tienes que criar. Pues la visita posteriores de mi amorosa matrona, eran muy esperadas, me sentía tranquila porque la parte fisiológica la tenía revisada con ella, pero qué pasa con mi interior si en mi entorno no encuentro lo que necesito, si mi familia no sabe darme lo que necesito, sin tan solo yo no sé ni lo que necesito, si estoypuerpara vulnerable, con mis sombras, con mi bebe demandante a todas horas agotada, desesperada, incomprendida,¿ con quien puedo compartir todo lo que me está saliendo al exterior...sin que me juzgue o me aconseje,.¿ pues con una persona preparada que sepa sostener esta situación . En mi caso gracias a todas esas mujeres compañeras doulas que han sido mi arropo mi cobijo , Y que han sabido estar ayudándome a sacar lo mejor de mí misma sin ni siquiera ellas saberlo. todas las personas podríamos tener esa actitud o presencia independientemente de nuestra profesión o formación. Queda mucho trabajo por hacer, como bien han comentado por aquí.