A nadie le dolía mi dolor
Hola a todas me llamo Maria tengo 45 años y me ocurrió cuando tenia 19 años en Colombia.
Cuando llega a término mi embarazo, en la semana 38 en la última consulta me detectaron preeclampsia aunque sólo me mandaron reposo y unas pastillas para bajar la tensión no obtuve más cuidados médicos y el día del parto, que ocurrió a los tres días, mi bebé había fallecido.
Con toda la "empatía" la ginecóloga me rompe la bolsa y me dice que el bebé ha muerto y que me aplicaran medicamentos para inducir el parto. Seguidamente me ponen la medicación y todo era insoportable. El dolor de saber que mi niño no estaba vivo, la medicación, todo ello me causaba tanto dolor que me desquicié. Gritaba, lloraba pero a nadie le dolía mi dolor, sólo querían que pariera y pasar a la siguiente.
Cuando nace el bebé sólo pude ver una parte de su cabecita. Me lo quitan y me duermen para despertarme después de que le habían enterrado.
Han pasado casi 26 años y aun me duele y sé que si se habría gestionado de otra manera esta tragedia, dejarme hacer mi duelo mirarle, tenerle conmigo sólo un momento para decirle adiós, quizá hubiese dolido menos.
Gracias quien lo haya leído y a todas las madres que han pasado por esta tragedia mi abrazo y mi solidaridad.