matías (unverified)
24 Abr 2011

Enviado por matías (no verificado) el

In reply to by Adri (no verificado)

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Muchas gracias por esta invitación a la reflexión y también a Adri por ampliar criterio. A todo lo bueno que leo aquí no tengo nada que agregar. Pero frente a una afirmación tengo que reaccionar, sin poner en tela de juicio el resto. Como padre, leer que los padres carecen de "legitimidad" me pone los pelos de punta. Ya sería hora de dejar de enfrentar y de hacer generalizaciones que, perdonen el epiteto, son absurdas. El padre tiene una perspectiva que és diferente pero que también es valiosa i válida. No digo que sea la misma que la de un parto pero no por eso és despreciable. Puestos a comparar experiencias, cuàndo se trata de ayudarse y de entenderse, que criterios vamos a aplicar: sólo las madres que han tenido un parto natural porque una madre que ha tenido cesarea "no tiene la legitimidad de una madre que ha tenido un parto natural, nunca pasó por lo mismo". O las madres que no han tenido epidural, las que han dado pecho etc... Todas estas cosas me parecen hermosas y dignas de ser compartidas, y lo digo como padre de hijos que nacieron por via natural, sin epidural y amamantaron entre 18 y 24 meses, pero no me parece que sean motivos de negar legitimidadr a las demás madres. Tal como negar de facto legitimidad al padre me parece nefasto. Creo que el embarazo, el parto y luego la maternidad son experiencias únicas para una mujer y que muchos de sus aspectos no los conocen los hombres, pero no somos sacos de harina inertes que atraviesan estos momentos sin vivirlos a nuestra manera. Y la paternidad en muchos hombres provoca el mismo tipo de inseguridades, ansiedades y cansancio. Compadezco sinceramente las madres que no han sentido en estos momentos dificiles y hermosos que compartían algo con el padre al margen del cual quedaban un poco los demás. Esta complicidad compartida al cuidar en todo momento de la misma criaturita, al ser los únicos que saben interpretar precisamente tal o tal inflexión del llanto, al compartir las noches de desvelo y los dias de enfermedad. Las cosas me parecen mucho más simples. Hay madres que no querrás tener en un grupo de apoyo porque son nefastas, y otras que son una ayuda-. Lo mismo que con los padres. Lo que pueda aportar cada uno depiende de factores infinitamente más diversos que sólo el sexo y la condición de madre. Ahora ya me quedo callado