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El nacimiento de mi hija Bianca

Cuando me enteré de que estaba embarazada, decidí que esta vez iba a buscar la forma de disfrutarlo (el embarazo anterior se me hizo de goma, no veía la hora de que termine ese estado, el cual no extrañé para nada). Tuve la suerte de empezar a conocer más a Vicky, una compañera de trabajo. Los recreos y las vueltas en bondi, se fueron poniendo un poco monotematicos.. resulta que en mi embarazo anterior Fidel nació por cesárea y yo me moría de ganas de esta vez poder parir, pero estaba cero informada al respecto. Vicky me sugirió entrar a un grupo de Facebook de mujeres que compartían relatos e información sobre ese tema, ahi empezó mi transformación. A los pocos meses Vicky quedó embarazada de su tercer bebé!!! Eran una fiesta las charlas en el bondi. Meses más tarde pudimos dar con Sentires. Empezamos el taller juntas y acompañadas de nuestras parejas. Fue hermoso. Me la pasaba leyendo relatos de pvdc, viendo videos de partos, y buscando información. Sentia que la tenía más clara que mi obstetra. Era genial.
En la semana 30 de gestación decidí cambiarme de obstetra. Me caía bien en las consultas pero lo sentía afilar el cuchillo.
El último trimeste me la pase bailando, fregando a morir la casa (raro en mi), morfando sin culpa y disfrutando de mi Fidi.. casi despidiéndome de esa forma tan unida de vincularme con el.
Llegue a la semana 40 muy feliz y nada ansiosa, solo físicamente cansada. Pelota, baile, caminatas, tés de frambuesa, y muchas contracciones de braxton. Estaba muy tranquila, mi obstetra nuevo me esperaba hasta la semana 42.
Semana 40.4 dormí a Fidel y me quedé dormida con él en su cama , como siempre.. al rato vino mi marinovio a despertarme para que me pase a nuestra cama. 24.20 hs entredormida sentí como bajaba lentamente ese hermoso chorrito tibio... me dio tiempo a pararme... le dije a Icha (mi pareja) "creo que estoy rompiendo bolsa" fui a baño y siii era ese líquido transparente.. con olor a semen, no habían dudas!! Divina sensación, momento feliz. Intenté irme a dormir pero no podía de la emocion así que me fui al living endonde había preparado el altar del amor para el trabajo de parto (velas, musiquita, pelota, mi cuarzo y chocolates) estuve hasta las 3 y pico hasta que me dio sueño. Me fui a dormir y a la hora volví a sentir como bajaba pero esta vez cayó un buen charco.. Durante las horas siguientes tenía contracciones fuertes pero eran cada 15/ 20 minutos. Mi obstetra me citó para revisarme. A las 16 hs. Tacto.. Me dijo "mirá acá estoy tocando la cabeza de tu bebé, el cuello esta blando pero falta.." me dio antibiótico por la bolsa rota y me mandó para casa. A eso de las 22 hs me pidió que vuelva a la clínica porque yo seguía igual con el tiempo entre contracción y contracción.
Por primera vez Fidel de 2 años y 10 meses iba a pasar la noche en la casa de mi suegra, muchas emociones respecto a nuestra separacion (el estaba chocho yo era la loca que lo abrazaba sobrepasada).
Llegamos a la clínica, tacto.. todo medio igual. Me ofrece que nos quedemos en una habitación para pasar la noche ahi y que me revise a la mañana siguiente, acepto.
Llevamos todo como para sentirnos en casa. Pelota, música….Me puse a hacer todas las cosas que me acordaba del taller de Sentires. Las contracciones ya dolían y eran cada 10 minutos, a las 6 de la mañana eran cada 5 minutos (yallevaba más de 30 hs con bolsa rota). Me empecé a poner un poco nerviosa porque sentía que iba demasiado lenta la cosa para lo que me iban a esperar... ahí llegó Paula la partera (desde el primer momento me hizo sentir cómoda, la terminé amando, una dulzura de persona, entre ella y mi marinovio se armó el equipo. Las contracciones cada vez más insoportables las pasábamos juntos, mientras uno me masajeaba, me colgaba del otro, o me hacian presión en la zona del sacro (alivio total), movimiento libre, mucha ooooooooo, mucho abrazo, llanto, se me iban las voces ya no entendía nada solo queria colgarme de alguno de ellos. En un momento Paula me hace un tacto... 3 centímetros de dilatación...(que??? No lo podía creer, yo gritando como loca de dolor...) llevaba casi 40 hs con bolsa rota. De esta parte no me acuerdo mucho, yo solo seguía con mi oooooh… Pero me acuerdo que Paula me miró (siempre muy contenedora) y me dijo que en un rato iba a venir Juan (mi obstetra). No me acuerdo tal cual la charla pero ya sabía que no me iban a esperar más. Y sinceramente yo tampoco podia más. Prepararon todo para llevarme al quirófano. No sentí frustración.
Me quedo con la alegría de saber que mi hija pudo elegir cuando nacer y yo transitar y disfrutar de su llegada.
En el quirófano me puse nerviosa reviviendo la horrible cesárea anterior. Paula me abrazó y me abrazó, me quedé dormida en su abrazo. Llegó Juan y me abrazó también. Me pidió perdón por no poder esperarnos más.
No fue el nacimiento que visualicé por meses, pero fue un nacimiento hermoso, y respetuoso. Luz baja, música y todo el equipo hablando en voz baja (casi que no los escuchaba) cuando la sacaron me la pusieron en mi pecho un rato largo. Fue uno de los momentos más hermosos de mi vida ... la besé, la olí, la abracé, y la amé profundamente. Lloramos, nos abrazamos los tres, enamorados de nuestra Bianca... silencio total en la sala. Respetaron las cosas que habíamos pedido como el corte tardío de cordón, que no la bañen y no le pongan las gotas en los ojos.
Fue tan bello que me emociono recordándolo.

Se dice que con la crianza, los días son largos pero los años cortos. Así que acá estamos.. abrazándonos fuerte al lindo quilombo de ser cuatro.