
La Violencia Obstétrica se define como una forma específica de violencia ejercida por profesionales de la salud (predominantemente personal médico y de enfermería) hacia las mujeres embarazadas, en labor de parto y el puerperio. Constituye una violación a los derechos reproductivos y sexuales de las mujeres.
La Violencia Obstétrica atenta contra los derechos humanos de las mujeres por el mero hecho de serlo, contra su dignidad e integridad, con el agravante de la especial vulnerabilidad que se da en las circunstancias que rodean a la reproducción.
El Comité para la eliminación de la discriminación contra la mujer (CEDAW) de Naciones Unidas ha emitido hasta el momento dos dictámenes referidos al Estado Español, el primero en 2020 y el segundo en 2022, en los que concluye que las mujeres que han llevado sus casos hasta la ONU sufrieron violencia obstétrica.